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ToggleLo sentimos y lo reconocemos. A veces nos ponemos a explicarle un proyecto web a nuestros clientes (o potenciales clientes) y se nos empiezan a escapar términos como el de «usabilidad web»… y notas cómo automáticamente se genera una cara de «nosedequemehablas» en la persona que tienes enfrente.
A veces se nos olvida a los que trabajamos en este sector que no todo el mundo tiene porqué saber que es un CMS, que es un Sitemap, o que es eso de que Google «me indexa». Y si echáis un vistazo por este blog comprobaréis como buena parte de los artículos que escribimos no van dirigidos a lo técnico ni a lo profesional, sino al acercamiento de todo este mundo al público en general.
¿De qué hablamos con «usabilidad web» o de la «experiencia del usuario en una web» ?
Estamos refiriéndonos a la facilidad o comodidad con la que un visitante de nuestra página web navega por ella, encuentra lo que busca, o cumplimenta las funcionalidades para las cuales está diseñada. De eso, a groso modo, estamos hablando.
Se trata de medir de qué manera los visitante de nuestra web pueden interactuar de manera efectiva y eficiente dentro de ella. Y además, esa navegación debe cumplir los objetivos del visitante y lograr en él una experiencia satisfactoria.
Con nuestra web personal o corporativa buscaremos ofrecer una imagen atractiva, con un diseño cuidado, pero no podemos olvidar que el último fin de nuestra página será convertir esa imagen en actos concretos de nuestros visitantes.. un formulario, una consulta, una compra, un mensaje, etc. Para que los usuarios de la web realicen esos fines deberán encontrarse con una web que sea fácil de manejar, rápida, y con un comportamiento coherente.
La usabilidad web abarca diversos aspectos
(Aunque muchas de estas cosas te parezcan de Perogrullo, ¡Nos encontramos de todo!)
- Facilidad de aprendizaje: A nuestros posibles clientes les debe resultar sencillo manejarse en la web y además en muy poco tiempo. Deben poder comprender rápidamente cómo navegar por el sitio, encontrar la información que necesitan y realizar las acciones deseadas. Una página web usable debe ser intuitiva y fácil de aprender a usar.
- Eficiencia: El tiempo es oro en internet. Y somos tremendamente impacientes navegando por una web. Una página web usable permite a los usuarios realizar tareas de forma eficiente, sin tener que invertir demasiado tiempo o esfuerzo. Esto implica minimizar la cantidad de pasos necesarios para completar una acción, proporcionar acceso rápido a la información relevante y utilizar un diseño claro y estructurado.
- Retroalimentación y respuesta: La web debe de hacer o se debe de comportar como el usuario espera que se comporte. No debe de haber «cosas raras» ni comportamientos inesperados. Es importante proporcionar a los usuarios una retroalimentación clara y relevante sobre sus acciones. Por ejemplo, cuando un usuario hace clic en un botón, debe recibir una respuesta inmediata que indique que la acción se ha llevado a cabo correctamente. Esto ayuda a los usuarios a entender qué está sucediendo y a tener confianza en su interacción con el sitio.
- Legibilidad y comprensión: Un factor muy poco tenido en cuenta cuando se trabaja el SEO de una web, muy tenido en cuenta por Google también. El contenido de una página web debe ser legible y comprensible. Esto implica utilizar una tipografía y un tamaño de fuente adecuados, asegurarse de que el contraste entre el texto y el fondo sea suficiente y utilizar un lenguaje claro y conciso. Además, la información debe estar organizada de manera lógica y coherente.
- Navegación y estructura: Cuidado con diseños demasiado modernos que nos confundan. La navegación debe ser clara y coherente en toda la página web. Los usuarios deben poder encontrar fácilmente la información que están buscando, a través de menús bien organizados, enlaces claros y una estructura de contenido lógica.
- Diseño visual: Por supuesto, la imagen, el diseño. Siempre primordial. El diseño visual de una página web debe ser atractivo y coherente con la identidad de la marca. Sin embargo, no debe comprometer la usabilidad. Es importante encontrar un equilibrio entre la estética y la funcionalidad, evitando elementos distractivos o que dificulten la comprensión de la información.
¿Cómo puedo mejorar la usabilidad web de mi página?
Exponemos aquí algunos (que no todos) de los puntos que pueden mejorar esa experiencia en tu web:
- Busquemos la sencillez. Esa es la gran premisa. Un buen diseño no está reñido con este punto. A veces afrontamos proyectos web que de partida ya son sencillos, pero la cosa se complica cuando el árbol o estructura de contenidos a ofrecer es amplia. Aquí es donde tenemos que dedicar tiempo para esquematizar todos esos contenidos de la mejor manera posible, para presentarlo todo sin abrumar, sin enormes menús y enlaces asaltándonos a la vista.
- Siguiendo en esa misma línea, intentemos tener un menú principal de navegación simple. Intentemos huir de menús con submenús, más submenús secundarios, etc. Llamemos desde ese menú a los elementos más destacables de nuestro negocio o actividad y utilicemos otros menús secundarios (en el pié de página o footer por ejemplo) para otras secciones menos relevantes.
- Echemos mano de los famosos «Call to Action». Mensajes destacados, breves y gráficamente muy vistosos, con los que invitamos a entrar en secciones o productos determinados para facilitar su búsqueda dentro de nuestro sitio. Normalmente utilizando tipografías grandes y colores vistosos acompañados de imágenes, iconos, o botones para resaltar el conjunto.
- Cuantos menos clicks, mejor. Si una vez que tenemos nuestra web en marcha nos damos cuenta que para llegar hasta un determinado punto o producto tenemos que hacer más de 3 o 4 clicks, algo no está bien pensado. Imagina que cualquiera sin demasiado interés entra en nuestra portada y para alcanzar algo que le pueda inquietar empieza a danzar de una sección a otra, de un apartado a otro subapartado. No sólo no despertaremos su curiosidad, sino que se cansará y abandonará por el camino.
- Que lo que mostremos se vea bien en cualquier dispositivo. Muy importante. El tráfico que a día de hoy va a recibir nuestra web desde smartphones o tablets (por ejemplo) va a ser muy grande, y debemos tener una web responsiva cuyos contenidos sean autoadaptables a todos los dispositivos y resoluciones, con cambios de tamaño y formato para textos, imágenes, columnas, etc. Igualmente, el visitante no se va a entretener en leer textos minúsculos o en estar haciendo zoom sobre la pantalla de su móvil.
- Páginas lo más ligeras y rápidas posible. Ya lo hemos dicho muchas veces. Somos unos impacientes en la red. No vamos a esperar 10 segundos a que una página se abra. Nos iremos antes. Por eso, al igual que decíamos que el diseño atractivo no tiene porqué estar reñido con la sencillez, igualmente no debe estarlo con la rapidez. Evitemos las enormes imágenes sin optimizar, los 20 plugins activos, las cosas innecesarias..
(Que bonito suena lo que vamos a decir).. en definitiva, hagamos de nuestra web un lugar agradable en el que estar y al cual resulte agradable volver.. 😉
Todo esto ayuda a generar confianza a nuestros clientes a través de nuestro escaparate en internet.
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